el desayuno era fantástico, bien presentado y con mucha variedad de opciones. nuestra habitación era impecable y maravillosa, contaba con tanto balcón como una vista fantástica.

Las vistas al Matterhorn desde las habitaciones frontales y desde el restaurante muy bonitas. El Spa perfecto.Personal amable y atento.Comidas exquisitas y de buena calidad.

Nada, todo fue perfecto.

Excelente Hotel en todos los aspectos que mejora en muchos cosas a varios hoteles de cinco estrellas que he frecuentado ultimamente. Primero su ubicacion: 3 minutos a pie de los remontes que conectan con todo el resort esquiable. Segundo la profesionalidad y cortesia de todo el personal: se desviven para que todo este bien y a tu gusto (nunca hay malas caras, ni peros: "el cliente es rey"). Ambiente familiar y discreto: todo tipo de clientela pero frecuentan las familias con hijos de todas las edades, tambien bastantes parejas. La propietaria al pie del canon en todo momento, desde el desayuno hasta la cena. Un spa y piscina de lujo: sin apretones, tranquilo, class, y todo incluido. Great!!!

Un desayuno impresionante; un personal muy amable y muy bueno. Las camas eran super cómodas, y había un minibar y un sofá en la habitación. Una ubicación buena y estupenda muy, pero que muy cerca del telesilla y de la colina y también del centro de la ciudad; un registro simpático.

Me ha gustado mucho este hotel tradicional. Una habitación funcional con un balcón a un precio asequible. - El personal era realmente bueno, el check-in fue simpático y el check-out tardío. - El desayuno era abundante y muy bueno con muchas opciones. - Tenía una ubicación fantástica, a poca distancia andando del Cementerio de montañeros. - Estaba a pocos pasos de las pistas de esquí, del teleférico y de bares.

Excelente atencion al usuario. Spa moderno y con buenas instalaciones (jacuzzi, piscina, sauna). A 50 metros del funicular a Sunnega y del autobus para ir al matterhorn paradise (5 mins autobus que pasa cada 5 minutos) altamente recomendable para el precio que tienen los hoteles en Zermatt

La situación dentro de Zermatt y su gran piscina interior.

La cama de 90 centimetros dentro de una habitación grande y confortable.

Un servicio de primera categoría, un personal brillantemente acogedor y agradable. Habitaciones funcionales y modernas con una bañera, un balcón y una buena cama. Desayuno realmente bueno. Ubicación fantástica en una zona muy tranquila. Piscina increíble. Una experiencia estupenda.

El detalle que reservamos una habitación de más y no nos la cobraron

Mucha amabilidad del personal de recepción, y la dueña te recibe y te despide en persona. Excelentes instalaciones de la alberca y el spa, puedes ver el Matterhorn desde la alberca, y meterte al jacuzzi o tomar un masaje. Nos ayudaron en todo lo que preguntábamos, desde hacer la cita con el instructor de ski, precios y orientación para todo lo que necesitábamos. Tuvimos que irnos muy temprano y nos prepararon el desayuno para llevar, de manera de que no nos lo periéramos.

La ubicación del hotel es ideal, ya que se encuentra cerca del acceso al funicular y de las pistas de esquí. Las habitaciones son espaciosas y cómodas, con vistas preciosas al valle. Además, el baño está limpio y bien equipado, y el servicio del personal es amable y atento. El desayuno es variado y delicioso, con platos de nivel. El spa es perfecto para relajarse después de un día de actividades.

El menú del restaurante deja mucho que desear y el servicio puede ser desagradable en algunas ocasiones.